La Puerta del Sol

La Puerta del Sol, el monumento más importante de la cultura precolombina de Tiahuanaco en Bolivia.

Según las informaciones de expertos antropólogos, la Puerta del Sol “sufre un grave deterioro y los arqueólogos impulsan su trasladado al museo de esa localidad. Pero los habitantes de la zona se resisten a perder el símbolo de su pueblo y tampoco aceptan una réplica”. La Puerta del Sol se encuentra en las ruinas del templo de Kalasasaya, situado en el frío altiplano andino a unos 70 kilómetros al oeste de La Paz y considerado uno de los monumentos emblemáticos de esta cultura y antecesora de los incas.

         

Una autoridad sobre el tema manifestó: 

“Se está preparando una sala especial para que este monumento esté resguardado”; y destacó que "varios especialistas, tanto europeos, como norte- americanos y nacionales, vieron conveniente que la mejor forma de resguardar este bloque es en un recinto cerrado". Sin embargo, la propuesta no termina de convencer a los habitantes de Tiahuanaco, pequeña localidad situada junto a las ruinas; pero si la puerta no se resguarda, "se calcula más o menos que en 10 ó 20 años prácticamente quedaría como una roca" en la que "la parte  iconográfica" desaparecería por completo”, señaló el director del Dinar.

         

Para el estudioso de la Antropología Gnóstica, J. J. Leal, la Puerta del Sol, no es algo caprichosamente colocado al azar, no se trata de ninguna puerta exterior de palacio; la puerta indica claramente “La Prueba del Santuario” la cual es cada vez más terrible pasándose cada vez en niveles más elevados;  quienes logran pasarla reciben en cada nivel una de las partes autónomas y auto conscientes del Ser así es como esa puerta, nos invita a entrar al Templo; pero son muy pocos los que logran entrar al Templo Interior del Ser.”

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